Deap Vally, a golpe de guitarra en Barcelona - crónica de su paso por Razzmatazz

Desi Estévez - Fotografía - Desi Estévez - 6/7 diciembre de 2013- Hora: 02.30 

-Precio:  12 euros -Lugar: Razzmatazz (Barcelona) -Promotor: Miles Away

Público: Lleno

Desi Estévez ©

<<Queridos Reyes Magos:

Quiero ver a Deap Vally como se merecen: en la sala y el público que se merecen>>

 El pasado viernes, dentro de la sesión de discoteca de RazzClubs de Razzmatazz, pudimos ver a este contundente dúo californiano por segunda vez en el presente año, la primera de ellas abriendo en marzo para Mumford & Sons.

 No disponen de un setlist muy extenso, pues sólo han editado un trabajo, 'Sistrionix', pero este par de mujeres que se auto describen como “A scuzzy White Stripes meets Led Zeppelin rock and roll duo” serían capaces de poner patas arriba cualquier sala pequeña que las arropara un poco. 

Y eso precisamente es lo que tampoco hemos podido vivir en esta última ocasión: el 90% del público, unas 300 personas, estaban allí de casualidad intentado ligar con algún erasmus en las sesiones de discoteca que programa semanalmente Razzmatazz. 

 Aún así, Lyndsey Troy y Julie Edwards salieron a las 3 de la mañana a desgranar su álbum debut a pesar de que era evidente que no se encontraban cómodas con la calidad del sonido, pues no pararon de dar indicaciones a los técnicos durante los primeros temas. Y es que seguramente no debe ser muy fácil ecualizar una guitarra y una barrería que suenan como si en el escenario hubiera cinco músicos. 

 A pesar de todo, fue un hecho el poder disfrutar de esa mezcla de sonidos blues, hard rock e incluso, en algunos momentos, stoner que son el sello de Deap Vally, junto con esa imagen de riot girls trasladadas a los 70'.

 'Raw Material', 'Lies', 'Walk of Shame', 'Gonna Make My Own Money', 'End of the World' o 'Baby I Call Hell' fueron algunos de los temas que pudimos disfrutar de un show más que correcto para las circunstancias. 

 Sin embargo, la noche memorable de Deap Vally en Barcelona todavía está por llegar. Esperemos que a la tercera sea la buena.

Desi Estévez ©