Arenal Sound 2013, la crónica del festival de masas -Parte 2-

Víctor Sánchez - 03 y 04 de agosto de 2013

- Hora: 18:00 -Lugar: Arenal Sound (Burriana) -Promotor: Arenal Sound

Público: Lleno

Foto: organización Arenal Sound

 Sábado. Mestizaje y tabla de sabores entre la electrónica y lo refinado

 En el penúltimo día de festival encontramos un cartel compuesto por grandes nombres que auguraban un lleno similar al del resto de días, y The Bloody Beetroots, Chase & Status y The Drums tenían la culpa de ello.

 Nuestra jornada comenzó con los primeros acordes de Klaxons, que abordaron un directo correcto pero algo incompleto para el exigente público, que a estas alturas solo quiere romper a bailar con ritmos desenfrenados.

 Con un perfecto castellano, James Righton fue presentando los temas de sus anteriores discos así como algunos cortes del futuro larga duración de la banda inglesa, que estuvo correcta sobre las tablas aunque no consiguió el estado óptimo para el público. Unas luces algo monótonas y una actitud reacia del foso no provocaron la conexión que todos esperábamos. Una pena.

 Desplazados unos metros más atrás, los finlandeses Satellite Stories pisaban por vez primera nuestro país y el sonido tremendamente acoplado del bajo no les hizo ningún favor, aunque la actitud y las ganas de demostrar que están a la altura de los primeros Two Door Cinema Club /el grupo peca de un parecido evidente y así queda recogido en su directo como en el disco de los fineses, 'Phrases to Break the Ice'/.

 Pese a las comparaciones, Satellite Stories molan, divirtieron e hicieron saltar a todo el que pasaba por el escenario Legendario.

 Entrados ya en la madrugada aparecían sobre el escenario principal los reyes de la noche indie, The Drums. Los neoyorquinos realizaban su primer festival estival de hacía tiempo, y eso se notaba. La actitud algo pasota de la banda /a excepción del batería y el camaleónico Jonathan Pierce/ frente al público no provocó el mayor de los aplausos escuchados en el recinto del Arenal Sound.

 Los decibelios subieron con temas como 'Money', 'Best Friend' o la esperada 'Let's Go Surfing' /que no escuchamos en el último concierto ofrecido por la banda en Madrid/.

 La fiesta acrecentó con la llegada de unos reclamados Reptile Youth, The Bloody Beetroots y Chase & Status, que dieron toda la caña que las hordas exigían.

 Domingo. Fin de fiesta con lo mejor del festival: The Maccabees y Kakkmaddafakka

 El domingo olía a despedida, pero eran olores de grandeza. El festival había preparado la llamada 'fiesta clandestina' en la que, desde las 12.00 h hasta las 17.00 h, 2manydjs, Feed Me y Nasty Mondays djs hicieron bailar bajo un reguero de agua artificial a miles de sounders que se agolparon en el Beach Club para festejar el último día de sol burrianés.

 Tras este primer plato, llegaba el colofón final. Dorian conseguía reunir a mucha gente aún siendo un horario tempranero, abordando un estilo muy pop y propio que cada vez consigue más adeptos. 

 After Musiic no se movió del escenario principal, pues sabíamos que lo que venía después era el frenesí audiovisual. The Maccabees, quizá la banda que menos encajaba en un cartel donde los nombres más punteros del año tienen cabida en ediciones más tardías, presentó los cortes de 'Given To The Wild', magnífico tercer LP de la banda que ahonda en la épica musical.

 Perfectos en ejecución y sublimes en sonido, eso es lo que son The Maccabees. 

 The Fratellis y su 'Chelsea Dagger' o 'Hen­rietta' volvieron a llenar el recinto con una apuesta de rock duradero que basa su fuerte en los himnos de la banda escocesa. Cayeron algunos temas nuevos y el público quedó calentito para disfrutar del brochazo de oro, la apuesta asegurada, la necesaria repetición: Kakkmaddafakka.

 Los noruegos vestidos de verano y entregados hasta el extremo no dejaron de jactarse por lo felices que eran volviendo de nuevo a Burriana. Una verdadera fiesta acompañada de los ya clásicos bailes del coro, el gamberrismo contenido de la formación y los temas que conforman 'Hest' y 'Six Months Is a Long Time', último LP de los de Bergen con el que han sabido encontrarse a ellos mismos, y a los miles de asistentes que no pararon de disfrutar en mayúsculas de un concierto que sabía a despedida.

 En total, 280.000 personas /cifra correspondiente a la suma del total de todos los días/ han pasado por el pequeño/gran recinto del Arenal Sound, que ya trabaja en su quinto aniversario para el próximo mes de agosto, en 2014.