Víctor Sánchez - Fotos: D. Arranz - 6 de mayo de 2016
- Hora: 21.00 -Lugar: Barclaycard Center (Madrid)
-Promotor: Live Nation -Público: Sold Out
Los británicos Muse parecen haberse tomado muy en serio lo de ser testigos del rock más potente del globo y se han convertido en el paradigma del espectáculo musical. De verdad, los de Devon presentan en este 'Drones World Tour' una puesta en escena que poco tiene que envidiar a la de magnos eventos como unos JJ.OO.
Era la segunda noche /primera en programación/ de los ingleses en Madrid, y eso se notaba. Los fallos de sonido, la elección del setlist o la entrega al público fue, si cabe, mejor y con más ganas /oído a asistentes que acudieron al Barclaycard Center las dos veladas/ Como si de un ensayo general se tratara, la primera fecha no vio más que una mejora en sucesora, que soltó los drones a volar a eso de las 21.35h.
La última tecnología fue protagonista: escenario 360º giratorio, grandes drones automatizados, proyecciones futuristas... que acompañaban /y a veces robaban protagonismo/ al setlist de la banda, una veintena de canciones elegidas con finura.
Arrancaron con su habitual intro de esta gira, el tema 'Drones', con el que aparecieron en escena y no pararon en casi 2 horas de set. Hubo un completo repaso de las nuevas canciones, y de las no tan nuevas, aunque por su carácter llenaestadios, estas siempre suenan potentes y con frescura. 'Reapers', 'Dead Inside', 'Bliss' y 'The 2nd Law: Isolated System', un acierto, o 'Supermassive Black Hole', 'Starlight' o 'Uprising', los temas que llenaron las gargantas del público y provocaron un salto unísono de todo el foso.
El bis, cuya espera fue amenizada con la presencia de drones, vídeos y más espectáculo tecnológico, tuvo como protagonista a 'Mercy', el confeti y una espectacular 'Knights of Cydonia' con la intro de 'Man With a Harmonica' de Ennio Morricone.
Esa noche no solo volaron drones, si no las 15.000 personas que abarrotaron el antiguo Palacio, donde disfrutaron desde principio a fin de una impresionante y loable escenografía, así como de la capacidad conmovedora del trío encabezado por Matt Bellamy.
